God of War es la perfecta reinvención de una franquicia

 

Llegó el Ragnarök

En vista de que God of War: Ragnarök por fin se ha estrenado para la fecha de publicación de este post, quise hacer algo relacionado a la susodicha franquicia. Hace 4 años había hecho un blog opinando sobre el God of War de la Era Nórdica, junto a otros videojuegos que salieron el mismo año como Spider-Man de PS4 y Detroit: Become Human, no obstante, considero a ese post como algo que ya está muy desactualizado, aunado a que en ese tiempo no tenía tanta experiencia analizando obras y me dejaba llevar por las opiniones de los demás, por lo que quise hacer una especie de remake, específicamente dando un análisis más conciso y enfocado en la Saga del Fantasma de Esparta, explicando el por qué según mi opinión, es de lejos el mejor ejemplo que he visto de la completa reinvención de una franquicia.

Bueno, debo aclarar que GOW no me parece una Obra Maestra narrativamente hablando, al menos no durante la Etapa Griega, pues esta carecía de muchos elementos que la pudieran catalogar como una historia digna de una novela de culto, o tan siquiera comparable a la Odisea de Homero y obras similares, ya que desde su concepción con la primera entrega de la saga, solo se enfocaba en entretener con su jugabilidad y la historia era algo que estaba muy de fondo o para complementar, básicamente en ese tiempo Santa Monica aplicaba la frase y forma de pensar de grandes creativos de la industria como John Carmack, el cual consiste en que la historia en un videojuego es como una porno, tú esperas que esté ahí, pero no es importante. Sin embargo, curiosamente la franquicia empezó a tomar un rumbo diferente luego de su segunda entrega, expandiendo mucho más su lore y contándonos una historia de brutalidad y venganza, aspectos que nunca se exploraron a profundidad durante GOW I, pues este último se trataba más sobre ir del punto a al punto b, enfrentando enemigos en cada escenario para después llegar al Final Boss, en pocas palabras, era acción pura y dura digna de un Hack and Slash, siendo este un género que se caracteriza por el combate cuerpo a cuerpo, mientras los personajes se sacaban habilidades rotas de la nada y armas de un poder descomunal, que literalmente los volvían invencibles en su propio juego.

Pero como había dicho antes, el caso de GOW es bastante particular, porque a diferencia de otras franquicias como Bayonetta y Devil May Cry, en donde la caracterización y desarrollo de personajes suele variar dependiendo del escritor y director de turno, y esto realmente no es algo tan importante dentro de dichas sagas, en GOW lo toman como algo prácticamente fundamental en la historia, siendo esta mucho más lineal y con más sucesos interesantes que contar. Claro que esto no la hace mejor o más compleja, ya que si nos fijamos en la trilogía original de la Saga Griega, esta seguía siendo una historia bastante simple y de fondo, pero que aún así tenía a un protagonista cuyo atractivo era su trágico pasado, lo cual era lo que resumía al personaje casi en su totalidad. 

El problema surgió cuando le quisieron dar demasiada importancia a Kratos sobre el resto de personajes, puesto que a la gran mayoría les faltaban carisma y una caracterización adecuada, siendo que incluso los Olímpicos se veían eclipsados por ese hecho, y los únicos que destacaban eran Zeus, Hades, Ares, Poseidón y Atenea, quienes tenían un trasfondo bastante calcado de la Mitología Original, pero que al menos había algo en sus personalidades que los hacían medianamente interesantes, además de las épicas peleas que los 3 hermanos protagonizaron durante GOW III. Y hablando de este último juego, a pesar de ser el más espectacular de la saga, fue el que más falencias presentaba en su narrativa. Quizás era algo comprensible, porque GOW II había dejado la vara muy alta, siendo dentro de la Era Griega la perfecta combinación entre acción de la buena y una historia atrapante desde el principio hasta el final, convirtiéndolo en uno de los mejores juegos de la Saga. Pero a la tercera entrega no parece importarle nada de esto, y se enfoca directamente en acción desenfrenada por el simple hecho de ser la parte final de esta etapa, provocando que se volviera una historia floja, y generaba inconsistencias en las acciones de los personajes, como Gaia traicionando a Kratos al decirle que solamente lo salvó de la muerte, y lo utilizó para derrotar a los Olímpicos y servir a los Titanes, para que horas de juego después le pida ayuda, olvidando el pequeño detalle de que el Espartano era bastante vengativo, por lo que obviamente traicionarlo nunca fue la mejor idea. También estaba el hecho de que muchas peleas de Jefes se hicieron por pura conveniencia del guion, pues daban a entender que los Olímpicos nunca fueron muy buenos trabajando en equipo, haciendo algo tan estúpido como tratar de matar a Kratos por separado, aún cuando durante la Gran Guerra habían derrotado juntos a los Titanes y fue Zeus quien dio el golpe de gracia, lo que resultaba incoherente con su discurso en el primer juego, donde animaba a sus hermanos a estar unidos y trabajar juntos.

Afortunadamente, Santa Monica se dio cuenta de este problema, y trataron de corregirlo en futuras entregas, como las precuelas de Ascension, Chains of Olympus y Ghost of Sparta, dando una historia más sobria y una mayor interacción entre los personajes, a pesar de que Ascension también generaba inconsistencias como la introducción de Las Furias (quienes nunca fueron mencionadas en toda la saga) y el modo multijugador, algo que fue del disgusto de muchas personas, además de otros aspectos en donde ya se notaba una falta de creatividad por parte de la empresa, como que la jugabilidad sea prácticamente un calco de GOW III, hizo que la franquicia se estancara durante un buen tiempo, hasta que se les ocurrió la brillante idea de reinventarse, trayendo una nueva entrega para 2018, lo cual nos lleva al punto de este blog.       

-La historia que lo cambió todo

Si tomamos en cuenta que GOW pertenece al género de la Fantasía, me doy el lujo de utilizar como ejemplo a obras de este estilo para explicar qué la hace tan diferente del resto. Sabemos que estas historias se caracterizan por tener una construcción de mundo muy vasta y bien planeada, con el objetivo de crear las reglas y la lógica durante el transcurso de la misma. Viajando a clásicos como Las Crónicas de Narnia, el World Building es tratado como un lugar mágico y oculto del mundo contemporáneo de los humanos, que existe con el único propósito de que los protagonistas sean los héroes de su propia historia, por eso es que desde un principio se nos cuenta sobre una profecía, la cual afirma que 2 hijos de Adán y 2 hijas de Eva, derrotarían a la Bruja Blanca en una guerra sin precedentes, donde al final le darían la paz al reino de Narnia. Lo mismo ocurre con Harry Potter, puesto que los que están más familiarizados con dicha saga, saben que también se trata de El Elegido, El Niño que Sobrevivió al intento de asesinato del Señor Oscuro de turno, quien se embarca en la aventura de un nuevo mundo por descubrir, donde en el camino vence sus temores y tragedias para estar en paz consigo mismo, pero nunca estando solo en el proceso. No obstante, el inconveniente que suele generar este tipo de historias, es que se le da más importancia al World Building que al desarrollo y caracterización de personajes, ocasionando que estos en su mayoría sean bastante planos y básicos, a su vez provocando indiferencia o rechazo en ciertos lectores y espectadores que generalmente buscan algo mejor. Aún así, se puede elegir por una alternativa más interesante, la cual han utilizado escritores más hábiles y experimentados, y se trata de mantener un balance efectivo en donde los personajes tengan un peso real en su Universo establecido, abarcando diferentes perspectivas y un desarrollo coherente con cada parte de la saga, resultando en una escritura de calidad, y esto es lo que El Señor de los Anillos hace a la perfección, ofreciendo un mundo muy rico y diverso en razas y culturas, usando como base una trilogía que forma parte de algo mucho más grande, y que está más allá de nuestra imaginación.

Esto último fue lo que usó GOW 2018 como referencia, teniendo a un mundo existente con múltiples reinos y mitologías, pero dando un punto de vista diferente a través de una narrativa más sólida y satisfactoria. Nos presentan a un Kratos más avejentado, pacífico y algo cansado de tantas luchas durante siglos, lo cual no lo hace menos peligroso. Resulta interesante que desde un principio te muestren que el simple hecho de estar en una tierra desconocida para nosotros, pero conocida para el Espartano por haber permanecido tanto tiempo escondido y haber formado una familia, hagan que los dioses nórdicos lo vean como un puente para cumplir sus objetivos a pesar de que dichas deidades eran más celosos y precavidos que los griegos, algo bastante explícito durante la primera pelea con Baldur y el encuentro con Freya. En este caso, el World Building te lo cuentan y te lo muestran al mismo tiempo y de varias maneras, como a través de los relatos de Mimir y el diario de Atreus, además del vistazo que nos dan sobre la gran mayoría de los 9 Reinos, y si a eso le sumamos los combates y mejoras dignas de cualquier entrega de la saga, el resultado es una experiencia inolvidable y espectacular.

Entonces, ¿qué es exactamente God of War?, es simple, una franquicia que comenzó como un Hack and Slash común y corriente, pero que a lo largo de los años aspiró a ser algo más, hasta el punto de convertirse en lo que es hoy en día. Me parece grandioso cómo la narrativa de sus juegos ha evolucionado tanto, creando paralelismos y metáforas con los propios personajes, lo cual se evidencia en la dicotomía que existe entre la relación de Kratos y Atreus con la de Baldur y Freya, siendo esta última un reflejo de la primera. Baldur se convirtió en lo que Atreus hubiera sido si su padre no habría puesto los pies sobre la tierra, y darle una educación diferente a la que el tuvo en Esparta, mostrando una faceta de Kratos en donde acepta un rol de padre y madre al mismo tiempo. Algo totalmente opuesto a lo que hizo Freya, cuyos deseos egoístas y de sobreprotección hacia su hijo, hicieron que este desarrollara un sentimiento de rencor durante el resto de su vida, siendo un dios frustrado que solo busca sentir alguna clase de dolor debido al hechizo que le implementaron, y su odio hacia su madre era tan grande, que estuvo dispuesto a asesinarla incluso luego de que anularan el hechizo y pudiera volver sentir todo a su alrededor. Es debido a este tipo de cambios que el juego ha traído a muchos detractores, que generalmente atacan a la obra por ya no ser lo mismo de antes o por pura nostalgia, pero lo curioso es que estas mismas personas son las que se quejarían si GOW hubiera tomado el camino de franquicias como Devil May Cry con su quinta entrega, y se hubiera estancado sin tener nada nuevo que ofrecer, por lo que al final uno simplemente concluye en que la gente no sabe lo que quiere, y por ende nunca podrás complacer a todos.

Por lo que habiendo explicado todo esto, llegó el momento de hacer la pregunta que le dará un cierre a este post.

¿Por qué God of War es la perfecta reinvención de una franquicia?

Esto es muy fácil de explicar. En una época donde suele destacarse la fama y el reconocimiento de una franquicia que ha permanecido vigente, es bastante obvio que surgirá la sobreexplotación de estos productos hasta el punto del hartazgo, trayendo consigo una nueva serie, un nuevo juego o una nueva saga que quiera continuar una historia que poseía un final establecido. Sin embargo, muy pocas de estas franquicias han hecho algo de calidad o tan siquiera decente, cayendo en los mismos errores y sufriendo de retcons y huecos argumentales de historias anteriores, sin un verdadero propósito o intención de generar un producto completamente nuevo, lo cual haría que tarde o temprano provoquen su propia muerte con la pérdida de su esencia, viéndose obligados a hacer remakes, reboots y revivals para llamar la atención y crear una nueva fuente de ingresos. 

Por eso resulta gratificante ver cómo GOW no cae en lo mismo, teniendo a grandes mentes creativas como Cory Barlog, quien evidentemente ha evolucionado en su forma de contar una historia desde GOW II, y se mostró genuinamente sorprendido de las críticas positivas que recibió su nueva obra, una gran muestra de lo comprometida que está Santa Monica Studio con una de sus franquicias más rentables, y es la razón por la que no solo el resto de la competencia, sino cualquier otra franquicia longeva, debería seguir el mismo camino a como dé lugar, en vez de sacar un producto sin alma que solo existe para cumplir una agenda corporativa, limitándose a hacer algo que se vuelva infantil e intrascendente. 

Todo esto me hace tener una gran confianza en que GOW Ragnarök obtenga el mismo resultado, e inclusive pueda ser superior a lo que su Obra Maestra del 2018 nos mostró con su fantástico mundo abierto.

Ahí lo tienen, un verdadero y perfecto ejemplo de cómo una franquicia debería reinventarse.

Que tengan un agradable día y nos vemos en el siguiente post.

Doctor Strange in the Multiverse of Madness y los diferentes tipos de terror

 

Enfrenta tus temores

Doctor Strange en el Multiverso de la Locura, es uno de esos experimentos del cine de superhéroes que logran un resultado bastante mixto con la audiencia, algunos diciendo que es decepcionante por el simple hecho de que el título del filme es una vendida de humo tremenda, y otros argumentan que pese a sus defectos la película es muy buena, siendo quizás lo más innovador y diferente a todo lo que nos ha ofrecido el UCM, en especial por la dirección de Sam Raimi y su forma de desarrollar personajes.

Aunque mi opinión de este filme es muy imparcial, debo admitir que luego de verlo me quedé sorprendido, pero no porque la historia sea una gran maravilla argumentalmente hablando, sino porque de forma efectiva la dirección me resultó muy interesante, puesto que es básicamente una fusión de varias películas de terror que se han hecho a lo largo de la historia, desde las clásicas hasta las modernas, y el estilo particular de Raimi al hacer este tipo de cintas, resulta en una experiencia muy gratificante de ver, y en ese aspecto no se podría esperar menos de uno de los mejores directores que tiene Hollywood en la actualidad. Esta película es una muestra de que el UCM nunca ha sido para niños, y lo único que hace que las personas tengan ese estigma sobre la franquicia, suele deberse a los chistes estúpidos y fuera de lugar que tienen tendencia a poner en cada escena, y si bien las cintas del Doctor Sexo no son la excepción, al menos no abusan tanto de este elemento, y hacen el intento de contar una historia que te puedes tomar en serio en los momentos adecuados, respetando de cierta forma la comedia que empleaba el Tío Sam en su trilogía de Spider-Man.

Bien, a pesar de que el objetivo de este blog no es el de hacer una crítica constructiva, me es inevitable  mencionar algunos de sus aspectos positivos y negativos, y vaya que en esto último hay bastante tela que cortar, como el hecho de que al final Wanda sea derrotada por una escena de pseudo-redención en donde se suicida porque se dio cuenta de que siempre fue la villana de la película (algo que irónicamente suele pasar en las películas de Raimi), o que América Chávez, si bien es un personaje agradable, el hecho de que sea tratada como una especie de objeto por su poder de viajar entre realidades no fue muy de mi agradado, en especial porque entorpece a la narrativa y no parece haber un verdadero enfoque en lo que la película quiere contar. 

Además, algo en lo que sí concuerdo con la gran mayoría, es que el concepto de Multiverso en esta película fue simple y llanamente potencial desperdiciado, pues aunque las escenas de Los Illuminati, si bien son muy interesantes y te presentan a personajes que tienen su carisma (como el propio Reed Richards y la variante de Charles Xavier) hubiera sido mejor idea que este grupo luchara junto a Strange en la batalla final, o que incluso demostraran ser mucho más cooperativos al estar conscientes de la amenaza que Wanda representaba, por lo que resulta bastante ridículo que te muestren a un grupo de Superhéroes que pudieron derrotar a Thanos en su realidad, e inclusive matar al Strange de su Universo, para que luego llegue la Bruja Escarlata a eliminarlos uno por uno de forma patética y como si de una película Slasher se tratara, además del Plot Device que usaron en América para darle pelea a una Hechicera super rota, que hasta hacía cagar de miedo al mismísimo Strange, con la típica excusa de creer en sí misma y en sus poderes, cuando apenas hace un minuto de la película estaba completamente asustada y terminó siendo sometida por Wanda para robarle su poder. En fin, son este tipo de cosas que hacen que el UCM no tenga muy buena reputación actualmente, ya que inclusive tienen la oportunidad de hacer algo diferente, y prácticamente la arruinan de no ser por Sam Raimi, quien mejoró enormemente la película, aunque eso tampoco hace que sea perfecta en todo sentido, sobre todo porque varias escenas se sienten recortadas y tal parece que Marvel metió su mano de más, impidiendo que se explorara la visión completa de este director.

Ok, ya habiéndome desahogado haciendo un resumen de mi opinión sobre el filme, llegó la hora de usarlo como ejemplo para cumplir el objetivo principal de este post, el cual es demostrar los diferentes tipos de terror que existen en cada género, y explicar cuál le corresponde a cada tipo de historia que se quiera contar. Por lo que sin más preámbulo, comencemos.

Tipo 1: Terror Estándar

A pesar de que le doy ese nombre por ser el tipo de terror más común en la ficción, la verdad es que es posiblemente el que más variantes posee, ya que puede estar disperso en distintos medios, desde las producciones que son más dirigidas a un público infantil, hasta algo que puede ser más adulto o perturbador para el lector o la audiencia. Si tomamos de ejemplo a la propia Doctor Strange, en sus escenas podemos ver múltiples referencias a otros filmes clásicos como El Aro y El Exorcista, puesto que vemos cómo Wanda es incluso capaz de poseer el cuerpo de su yo de otra realidad para estar con sus hijos e ir nuevamente por América para secuestrarla y robarle su poder, habiendo momentos de tensión durante la cacería de la Bruja. Esto también se muestra en otras producciones de Sam Raimi como la Saga de Evil Dead, donde el movimiento de cámara y el contexto de la escena, aunado al juego de la iluminación y el simbolismo, las hacen películas memorables que saben tomarse en serio a sí mismas aunque se caractericen por ser una mezcla de terror y comedia al estilo de la Saga de Scream, la cual retoma los conceptos más básicos de una cinta Slasher, que si bien he mencionado en varias ocasiones que este sub-género nunca ha sido mi favorito, no puedo negar que en su momento significó toda una innovación que incluso llegó a provocar miedo durante los 70´s, 80´s y 90`s por las historias tan siniestras que surgían de la mente de sus autores, tal y como lo fueron Wes Craven con Pesadilla en la Calle del Infierno, o Tobe Hooper con La Masacre de Texas y Sean Cunningham con Viernes 13, dando nacimiento a los Hombres Lobo, los Drácula y los Frankenstein de esa época.

Ahora, en caso de que el autor en cuestión quiera irse por un terror más ligero, puede optar por historias que no necesariamente deban tener posesiones demoníacas o festivales de órganos y sangre, como la saga jugable de Luigi´s Mansion, donde nos muestran a los típicos fantasmas inspirados en los Ghostbusters originales, siendo enemigos que estorban al protagonista en cumplir su objetivo, pero que la gran mayoría no son seres malvados, simplemente son almas en pena de personas que murieron en ciertas circunstancias, o que son así debido a la propia naturaleza del personaje, como los Boos y el monarca de la mansión donde el juego tiene lugar, el King Boo. Sin embargo, en obras de este estilo se puede implementar cierta atmósfera de terror si su creador lo desea, siendo Coraje el Perro Cobarde el mejor ejemplo de esto, una de las pocas caricaturas que en cada episodio te presentan a un villano peor que el anterior, dando cabida a situaciones escalofriantes y que pueden sacar de onda a cualquiera, como todo lo que se muestra en el episodio de El Espeluznante Fred, un personaje que provoca pesadillas en niños y adultos por igual.

Volviendo a Doctor Strange, si se quiere escribir una historia similar a dicho filme, se puede tener la opción de que el villano sea una fuerza antagónica imparable a lo tipo Jason Voorhes y Michael Myers, o inclusive hacer algo más interesante dándole habilidades que sean una amenaza para el resto de personajes, como lo que hace Freddy Krueger con sus poderes de pesadilla con tal de engañar a sus víctimas de turno, para luego matarlas al final de la película.

  

Tipo 2: Terror Existencial

Este tipo es el que se utiliza mayormente en las historias que tengan un mensaje pragmático y complejo, además de tener cierta tendencia a los relatos de carácter lineal. La denominación popular que se encuentra en esta clasificación recibe el nombre de terror psicológico, que si bien su existencia real ha sido muy debatida, recibe ese nombre por ser aquel sub-género que hace que el lector o espectador se ponga en el lugar del protagonista, haciendo de la historia algo mucho más impactante y difícil de olvidar. La razón por la que yo lo denomino como existencial en lugar de psicológico, es porque este tipo de historias pueden contener psicología y filosofía por partes iguales, lo cual ocasiona que sea más interesante. De ejemplos podemos tener a las adaptaciones de Hannibal Lecter, siendo que las películas y la serie de televisión muestran una narrativa profunda y simbólica, provocando que sus personajes sean algo más allá que solo asesinos en serie o individuos con fetiches extraños y poco agradables, cada uno de ellos poseyendo su propia mentalidad y visión de la vida y la muerte, siendo en el fondo seres humanos sumamente trastornados y de moral retorcida. Una muestra que deriva de esto son algunos íconos de los Creepypastas como Jeff The Killer y similares, con la diferencia de que en la gran mayoría de sus historias solo son personajes irracionales que se obsesionan por matar sin importarles que eso pueda tener alguna consecuencia en sus actos, teniendo la típica vida miserable y deprimente de cualquier asesino en serie, lo cual hace que los lectores puedan empatizar con ellos de alguna manera.

Sin embargo, también se puede ir por un camino diferente, y presentar una historia al más puro estilo de The Lighthouse o True Detective, siendo ambas de carácter antológico y que no se ubican en un período de tiempo específico, puesto que el objetivo del autor es contar algo que se salga completamente de lo común, y al final es la misión del espectador el querer darle una interpretación a su obra, aunque para escribir esta clase de relatos se requiere de mucha habilidad y experiencia para que funcione y sea considerada una buena historia. La primera temporada de True Detective hace algo curioso respecto a esto, ya que hace que algo tan ordinario como dos sujetos veteranos hablando en un interrogatorio policial, se transforme en una situación intensa y apremiante con tan solo relatar hábilmente lo que sucedió en uno de sus días de trabajo, ayudándose en la excelente dirección y banda sonora de la escena.

Tipo 3: Terror Cósmico

A este lo dejé de último debido a que es el más difícil de realizar, no por nada también ha tenido ciertas variaciones con el pasar de las épocas. Como sabrán, el terror cósmico nace a partir del miedo a lo desconocido, aquellos enigmas que pueden encontrarse en las profundidades del infinito y vasto océano, o incluso en la inmensidad del espacio exterior. En los primeros relatos de Lovecraft estos eran horrores indescriptibles y aberraciones de la naturaleza, seres paranormales y extra-dimensionales que ven a la raza humana como simples insectos, o que por su enorme poder y estatus en la realidad de la física cuántica y la metafísica, a penas conocen nuestra existencia, y solo nos ven como parásitos que no merecen un lugar en el Universo. Claro que esta es la definición más clásica, pero también están los horrores sobrenaturales que dan un paso más allá del típico monstruo caótico y unidimensional, como lo que podemos ver en el anime y manga de Hellsing, donde el Vampiro Alucard es mostrado como una bestia demoníaca y sedienta de sangre, un ser prácticamente imparable y sumamente poderoso, cuya liberación de todas sus almas harán sonar la canción del mismísimo Infierno. No obstante, las obras al estilo de Hellsing son más terrenales, y realmente no representan el terror cósmico en todo el sentido de la palabra. Es por eso que si nos queremos poner más estrictos con el término, la Mitología Lovecraftniana es el mejor exponente, además de otras que se aproximan como El Rey Amarillo y un Habitante de Carcosa, relatos muy recomendables de este sub-género.

Otra alternativa que se ha visto es la que existe en el anime y manga de Monster, donde todos los monstruos, demonios, y cualquier horror sobrenatural y cósmico son encarnados en un ser humano que es visto como una Bestia sin Nombre, un ser de 7 cabezas y 10 cuernos que solo le importa ocasionar el caos y la destrucción a donde quiera que vaya, solo con el objetivo de eliminar a cualquier persona que conozca su verdadero nombre o identidad, un asesino en serie que irónicamente busca ser asesinado por la persona que le devolvió la vida, pero que al final de su obra solo se da a entender que el monstruo volvió a revivir y su bestia interior continúa suelta por el mundo.

Para terminar con el post, quiero decir que la utilización de cualquiera de estos 3 tipos es muy factible en cualquier historia, solo se necesita el enfoque adecuado y el conocimiento suficiente, de ese modo es 100% seguro que la narrativa será de calidad. Una lástima que todo el potencial que podría tener una película como Doctor Strange haya sido tan desperdiciado, ya que todos estaremos de acuerdo en que pudo dar para mucho más, y ser un verdadero Multiverso de la Locura que nos deje con la boca abierta. En fin, sin más que agregar, les deseo un agradable día y un Feliz Halloween.

Alien X

El Alien Omnipotente

"Alien X. Aprobado, detener el agua ha sido, aprobado".

 

 

-Alien X durante su primera aparición.

Historia:

 

Alien X es uno de los tantos alienígenas contenidos en el Omnitrix del humano Ben Tennyson. Es miembro de los Celestialsapien, una raza de entidades cósmicas descritos como seres todopoderosos debido a su habilidad de alterar y controlar la realidad a su antojo, siendo capaces de cambiar el Universo de forma constante, además de existir en la Forja de la Creación, un lugar fuera de la realidad misma. Dentro de Alien X existen dos conciencias aparte de la de Ben, denominadas como Bellicus y Serena, siendo que cada Celestialsapien contiene estas mismas conciencias, las cuales realizan largos debates sobre el sentido de la vida o sobre por qué se debe realizar una acción en especifico, llegando a discutir por toda una eternidad. Ben suele recurrir a Alien X en situaciones extremas donde no tiene más opción que utilizarlo, pero generalmente opta por no hacerlo debido a que es incapaz de controlarlo por sí mismo.

 

 

 

Poderes y Estadísticas:

Nombre: Alien X

Verso: Ben 10: Fuerza Alienígena

Género: Variable, Alien X es masculino, Bellicus es masculino, Serena es femenino

Edad: Desconocida

Clasificación: Celestialsapien, Entidad Cósmica, Alien del Omnitrix, Alterador de la realidad, Salvador Universal, Héroe

Sistema de Poder: Nivel Universal Complejo (2-C Bajo), Superior con Alteración de la Realidad

Poderes y habilidades: Capacidades físicas sobrehumanas, Inmortalidad, Regeneración, Manipulación del Tamaño, Control Corporal, Auto-Sustento, Vuelo, Telekinesis, Reflexión de Ataques, Manipulación Temporal, Duplicación, Creación de Agujeros Negros, Reality Warping, etc.

Capacidad Destructiva: Nivel Universal Complejo, Superior con Alteración de la Realidad  (Es capaz de pelear contra el Gladiador Galáctico y dañarlo con sus ataques, siendo este un Celestialsapien que puede aumentar su tamaño hasta el punto de ser comparable a una galaxia. Recreó todo el universo desde dentro de sí luego de la destrucción del Annihilarrhg, este siendo un dispositivo que luego de activarse puede destruir Universos enteros e indirectamente crear flujos de tiempo de los cuales divergen líneas temporales. Se declara de forma directa que es capaz de crear y destruir Universos a su antojo. Los Celestialsapiens son tan poderosos que pueden cambiar la naturaleza del espacio y el tiempo. Se menciona que su poder es ilimitado) 

Velocidad: Masivamente FTL (Demostró poder recorrer distancias interplanetarias durante su pelea contra el Gladiador Galáctico, y pudo crear un agujero negro alrededor de este último cuando tenía el tamaño de una galaxia y sin que pudiera reaccionar. Es capaz de mover galaxias, siendo una hazaña calculada de este nivel), eventualmente Inconmensurable (Los Celestialsapiens existen fuera del espacio-tiempo, simultáneamente en todos lados y en ningún lugar, lo que les otorga esta velocidad)

Fuerza de Levantamiento: Al menos Galáctica, posiblemente Superior con Alteración de la Realidad (Comparable al Gladiador Galáctico, pudiendo soportar la presión generada por este último mientras tenía el tamaño de una galaxia. Recreó una copia 99.99% exacta del Universo, y para eso requirió mover incontables galaxias)

Fuerza de Choque: Nivel Universal Complejo (Mientras Piedra utilizaba una parte de Alien X, pudo romper un campo de fuerza que iba a proteger a los Contumelia de la energía liberada al crear el Universo. Debe ser superior a Feedack, quien pudo absorber y manejar una energía equivalente a un Big Bang)

Resistencia: Nivel Universal Complejo (Es capaz de resistir la presión generada por el Gladiador Galáctico mientras tenía el tamaño de una galaxia. Se nos confirma que puede sobrevivir a la destrucción de una línea de tiempo. No mostró ningún daño aparente ante los efectos del Annihilarrgh, el cual se nos vuelve a confirmar que puede crear espacio y tiempo, siendo que los poderes de Maltruant no funcionaban debido a que el tiempo aún no existía)   

Durabilidad: Posiblemente Ilimitada (Los Celestialsapien pueden durar activos por siglos enteros)

Inteligencia: Variable, Alien X depende mucho de Ben, Bellicus y Serena para poder tomar una decisión o realizar una acción. Sin embargo, demuestra saber utilizar sus poderes de forma eficaz y es muy bueno en el combate cuerpo a cuerpo, llegando a derrotar al Gladiador Galáctico, un Celestialsapien especializado en las batallas y el cual Ben no podía derrotar con sus otros alienígenas debido al gran poder que este posee. Tiene la inteligencia de Ben, quien a su vez posee experiencia en combate desde que era un niño, y es la voz de la razón dentro de Alien X, siendo Bellicus la voz de la ira y la agresión, y Serena la voz del amor y la compasión.

Equipamiento: Ninguno notable.

Debilidades: Alien X no puede luchar sin la intervención o permiso de Bellicus y Serena. Está limitado por el Omnitrix, siendo que Ben al ser solo un humano, no puede comprender o utilizar el máximo potencial de un Celestialsapien, y solo puede estar como Alien X por un límite de tiempo indefinido antes de volver a su forma normal.

 

 

Habilidades especiales/hax:

 -Inmortalidad (Vida eterna): Los Celestialsapien parecen ser imperecederos al tiempo.

-Regeneración: Escala del Gladiador Galáctico, quien regeneró una parte de su brazo luego de que esta fuera explotada.

-Manipulación del Tamaño: Escala del Gladiador Galáctico, quien pudo hacerse igual o más grande que una galaxia.

-Teletranspotación: Puede teletranspotarse al igual que el Gladiador Galáctico.

-Control Corporal: Puede moldear a voluntad la forma de su cuerpo al igual que el Gladiador Galáctico.

-Auto-sustento: Puede sobrevivir en el espacio exterior.

-Vuelo Espacial

-Telekinesis: Demuestra tener poderes psíquicos.

-Reflexión de ataques: Pudo reflejar un rayo de energía.

-Manipulación Temporal: Puede rebobinar o retroceder en el tiempo.

-Duplicación: Puede crear múltiples copias de sí mismo.

-Creación de agujeros negros: Pudo crear un agujero negro igual o más grande que una galaxia gracias a la cantidad de copias que hizo.

-Reality Warping, Manipulación de las Leyes y Manipulación de la trama limitada: Los Celestialsapien son conocidos por su capacidad de alterar la realidad, inclusive llegando a alterar el diseño de la serie. También serían capaces de alterar el Universo para cambiar la naturaleza del maná. 

-Titeretismo Corporal: Puede controlar el cuerpo de otros individuos en contra de su voluntad.

-Separación de la Realidad: El Profesor Paradox explica que la Forja de la Creación existe fuera del Espacio-Tiempo.

-Acausalidad: Los Celestialsapiens existen fuera del espacio-tiempo, simultáneamente en todos lados y en ningún lugar

-Múltiples seres: Tiene dos conciencias dentro de sí, Bellicus y Serena.

-Manipulación de Realidad de Bolsillo: Bellicus, Serena y Ben poseen una dimensión de bolsillo dentro del cuerpo de Alien X.

-Resistencia al Borrado Existencial: Se mostró inmune ante los efectos del Annihilarrgh, el cual borró de la existencia a todos los seres en el Universo. 

Nota: Ficha original

"¡Sorpresa!"

Alien X recreates the universe theme

 

Obi-Wan Kenobi debió ser una trilogía en lugar de una serie | Crítica y Opinión

I have the high ground

 

 

Mi reacción al terminar de ver la serie de Obi-Wan:

Bueno, creo que esta es la primera vez que opino de forma tan explícita sobre algo que no es una película (al menos en este Blog) por lo que quizás me cueste trabajo dar una opinión concreta. Sin embargo, me veo en la obligación de hacer esta reseña, pues tengo muchas cosas que decir al respecto sobre Obi-Wan Kenobi, al igual que las cosas que se han hecho sobre Star Wars últimamente, así que manos a la obra. En caso de que les interese ver la serie por ustedes mismos, les advierto que habrán varios spoilers, aunque no lo considero algo tan importante. Comencemos.

Obi-Wan Kenobi fue de esos productos que provocó una oleada enorme de hype por todo lo que significaba para la franquicia, mostar una las tantas historias que nunca han sido contadas en la Galaxia lejana, ubicándose cronológicamente 10 años después de la Venganza de los Sith, teniendo por primera vez al Maestro Jedi con el Terreno Alto y el clásico Hello There como protagonista, quien en su búsqueda de paz durante su retiro como un Jedi,  se vería obligado a enfrentarse a su pasado, cuya encarnación del mismo sería nadie más y nadie menos que su antiguo Padawan, ahora convertido en un Lord Sith de armadura oscura y aura siniestra, que busca venganza contra su viejo camarada, hermano y Maestro.

La premisa de por sí resulta fascinante, ya que plantea un concepto de dualidad en ambos personajes, la clásica lucha del bien contra el mal, siendo que en este caso tiene un trasfondo que da para crear una historia atrapante, entretenida y compleja al más puro estilo de Star Wars, con diálogos interesantes y batallas épicas con Sables de Luz que resultan en toda una aventura de Space Opera, que puede ser disfrutada por cualquiera que sea asiduo a este sub-género de la Ciencia Ficción. 

Lamentablemente, gran parte de la serie se siente como potencial desperdiciado en todo el sentido de la palabra, tanto es así que incluso alguien que sea verdaderamente fan de la franquicia pudo haber hecho un trabajo infinitamente mejor. Me resultaría increíble el cómo Disney tiene la facilidad de arruinar un producto que en las manos correctas tendría la oportunidad de brillar en todo su esplendor, sino fuera porque ya lo habían hecho antes con su nueva Trilogía, aunque ese tema lo abarcaré más adelante.

Pero lo que no termino de entender es por qué otras series de su mismo Universo como The Mandalorian y el Libro de Boba Fett, puedan tener una mayor calidad a pesar de que estas 3 series son muy similares entre sí, por lo que fácilmente Obi-Wan Kenobi pudo ser, si bien no la mejor serie de Star Wars, tenía todo el potencial para ser el equivalente al No Way Home de esta franquicia, pues era obvio que gran parte de su atractivo era el propio fan service, con el regreso de Ewan Mcgregor y Hayden Christesen en su papeles principales al igual que otros actores, por lo que se pudo crear una gran historia que sea igual o mejor que el glorioso Episodio 3. Sin embargo, aunque me estoy oyendo bastante negativo al respecto, debo admitir que la serie me gustó, hay momentos muy rescatables y escenas memorables, por lo que la consideraría una serie buena pero muy a secas, y más adelante explicaré más a fondo el por qué de esta opinión.

 

 

Al ser una serie de tan solo 6 episodios, me resulta más fácil analizarla sin explayarme de más, sobre todo para explicar los puntos que la convirtieron en un fracaso en cuanto a guion y dirección se refiere:

 

 

Premisa mal ejecutada:

 

La serie comienza de una forma bastante decente, puesto que los primeros 2 episodios mostraban vestigios de cómo Obi-Wan vivía su día a día en Tatooine, mientras vigilaba al pequeño Luke Skywalker y a su familia para protegerlo de cualquier potencial amenaza. Era curioso ver a alguien como un Jedi trabajando de algo que no consistía precisamente en su oficio habitual, siendo un Carnicero con una mala paga y un desempeño frustrante, debido a la crisis económica que afrontaba la Galaxia luego de la derrota de la Antigua República, teniendo a un Emperador delirante y malvado como Lord Palpatine a la cabeza. Esto se vuelve más interesante con la aparición de los Inquisidores, Maestros Siths que se dedican a cazar Jedis y obtener una recompensa por ello, lo cual provocaba una gran tensión a causa de dicha amenaza. La búsqueda de Obi-Wan por parte de Reva y el resto de Inquisidores es lo que mueve toda la trama, generando en acontecimientos importantes como el secuestro de una joven Princesa Leia, algo que obliga a Kenobi a salirse de su retiro momentáneamente, ya que sus padres no confiaban en nadie mejor para hacer el trabajo. Me gustó el hecho de que el primer episodio concluye en que el Senador Bail Organa incitaba a su amigo a olvidar el pasado y vivir el presente, pues era evidente que Kenobi pasaba por una severa depresión a causa de todo lo que sucedió con Anakin, animándolo a pelear una última batalla, y dicho episodio termina con el inicio de un viaje de redención.

 

El problema es que durante y después del episodio 1, es donde empiezan a generarse incoherencias, como por qué hacer que un grupo de Mercenarios secuestraran a Leia durante el día, cuando eso perfectamente pudo ser evitado por el propio ejército de Alderaan, e incluso hace que uno se pregunte por qué Leia no era vigilada por los Guardias de los alrededores, porque ok, uno podría argumentar que la niña era muy irreverente, y se escapaba para evitar hacer algo aburrido como lo es tener que sentarse a escuchar los parloteos de un montón de políticos y los insultos de sus familiares, pero eso no es una excusa para dejarla escapar cada vez que se le antoje, más cuando la misma serie establece que ella es igual o más importante que Luke a causa de su rango. Además, la propia serie se ve forzada a armar conveniencia tras conveniencia para hacer que Obi-Wan rescate a la Princesa, como que casualmente apareciera alguien que resulta ser un falso Jedi, el cual rescataba a miembros de la Resistencia para guiarlos a un lugar seguro, y de entre todos los escenarios posibles, Obi-Wan logra dar con el paradero de Leia y llegar a donde la tenían encerrada, donde casualmente le tendieron una trampa que Kenobi pudo haber anticipado por experiencia, y en donde casualmente escapa lanzando un frasco de humo al más puro estilo de Heisenberg de Breaking Bad. La dirección tampoco ayuda mucho en ese aspecto, ya que primero tienen a Reva haciendo parkour para atrapar a Kenobi, pero de una forma que nunca explican, él y Leia logran escapar del campo de tiro y de un par de Cazarrecompensas, y hasta a Obi-Wan le da tiempo de salvarla de una muerte segura empleando la Fuerza por primera vez en la serie, y logran escapar del planeta en una Nave de Comercio, no sin antes de que Reva le haga saber que Anakin está vivo y que ahora se hace llamar Darth Vader.

 

Lo más irónico de todo esto, es que en el propio episodio 3 de la serie, es donde por fin vemos el tan esperado encuentro entre el Héroe y el Villano, lo cual honestamente se debieron reservar para más adelante, incluso era mejor idea dejarlo para el final, de esa manera el combate no se vería tan anti-climático y forzado. Por un lado, era interesante ver cómo Vader dominaba a Kenobi sin ningún esfuerzo debido a que este último se había debilitado con el pasar de los años, al punto de someterlo y quemarlo vivo como venganza por lo que le hizo en Mustafar, pero de forma muy conveniente lo deja escapar a pesar de que la idea era secuestrarlo y torturarlo hasta la muerte, puesto que así es como suele funcionar la psicología de un Lord Sith ante los Jedi. Estas contradicciones en el guion son algo muy recurrente en Star Wars, pero sucede exactamente lo mismo que con la Trilogía hecha por Disney, es decir, desperdician todo el potencial de una historia y a sus personajes, para entregar un producto demasiado comercial que entretiene a un público menos exigente, o que no tienen por qué pensar igual que muchos pseudo-críticos elitistas que creen tener la verdad absoluta, pero el problema es que muchos sabemos que el producto final pudo ser infinitamente mejor.

Lo peor es que en los últimos 3 episodios la calidad de la serie no cambia en nada, con situaciones igual de convenientes como la vez en la que se infiltran a una base de la Flota Imperial para, ¿ustedes qué creen?, volver a rescatar a Leia y escapar del lugar sin ningún rasguño, o la vez en la que se enfrentan a todo un grupo de Stormtroopers y los únicos personajes que sufren las consecuencias de tal acto son Tala Durith (personaje que por cierto es bastante olvidable) y el Droide de esta última, el cual tampoco es que tenga mucho carisma o relevancia como si lo pueden tener R2D2 o C-3PO. Otra cosa que debo mencionar, es que la gran mayoría de los personajes están mal escritos o no tienen un desarrollo destacable, como el propio Darth Vader, cuyo conflicto en esta serie solo se centra en pelear contra Obi-Wan y vengarse de él, pero nunca nos dan un vistazo a su nueva mentalidad como un Sith, o mínimo profundizar en cómo se siente en su cuerpo metálico, el cual limita mucho sus movimientos y estilo de vida, siendo que no nos dan un indicio de eso hasta el episodio final. 

 

El desaprovechamiento de los Inquisidores también es muy evidente cuando le quieren dar demasiada importancia a un personaje tan nuevo como lo es Reva, de quien luego te explican que en realidad era una joven Padawan que sobrevivió a la Orden 66, y que quiere asesinar a Vader para vengar a sus camaradas caídos, pero todo el conflicto resulta muy poco creíble cuando quiere cambiarse de bando, en especial cuando de forma muy conveniente sobrevive a un ataque de Vader para que luego se entere de la existencia de Luke y se dirija hacia Tatooine para matarlo, algo que al final no puede hacer a pesar de que ya tenía experiencia siendo una Inquisidora. Hablando de los personajes femeninos, desde hace un buen tiempo se sabe que Star Wars tiene un enorme problema a la hora de manejar a sus féminas, siendo que hasta la propia Leia de esta serie es un personaje que todo el tiempo estorba al protagonista en su objetivo, además de ser bastante molesta en varias ocasiones, teniendo uno que otro diálogo o momento rescatable solo porque la trama lo requiere.   

 

El episodio 6:

Honestamente, no tengo idea de si es cuestión de casualidad o algo por el estilo, pero el último episodio de esta serie me recordó mucho a El Regreso del Jedi en cuanto a nivel narrativo se refiere. Sin embargo, lejos de que eso sea una virtud, es muy triste ver que este sea uno de esos productos que no se vuelven buenos hasta que llegas al final del mismo, como si los productores le pusieran más esfuerzo a la culminación de la obra y le restan importancia a todo lo demás. Te muestran algo que debió ser mucho mejor construido para que sucediera, la batalla final de Darth Vader vs Obi-Wan Kenobi, con música épica y transiciones emocionantes, además de momentos dramáticos en donde Anakin y su Maestro conversan por última vez, dando la impresión de que en el interior del Lord Sith todavía existía cierta bondad y luminiscencia por recordar su pasado mientras tenía de frente a quien una vez fue su mentor, aunque si lo comparamos con la batalla final de La Venganza de los Sith se queda bastante corto. 

 

Me hubiera gustado que algo tan importante como el reencuentro entre 2 de los personajes más icónicos de su franquicia, sea a través de una historia con mucha carga dramática y valor narrativo, como por ejemplo, que todo el complot para realizar el secuestro de Leia haya tenido más planeación por parte de los Inquisidores, con el objetivo de cazar y finalmente capturar a uno de los Jedis restantes, ya que tal y como dijo el propio Vader, no se trataba de cualquier Jedi. Al menos eso hubiera respondido a varias preguntas que se quedaron en el aire, como por qué Reeva sabía que el secuestrar a Leia haría que el Senado de Alderaan recurriera precisamente a Kenobi, cuando durante ese tiempo ella no estaba consciente de la relación que Obi-Wan tenía con ellos sino hasta el final de la propia serie, donde intenta matar a Luke por eso mismo. Y hablando de eso, habría sido un gran detalle a nivel narrativo que la batalla final sea precisamente en Mustafar, pues este no solo era el planeta que Vader eligió para resguardarse y que constantemente le recordaba a sus tiempos como un Jedi, sino que en dicho planeta ocurrió el combate en donde lo perdería absolutamente todo, a sus amigos, a su familia y a sus propios camaradas de la Antigua República, viéndose forzado a seguir un camino lleno de desgracias y retribución, creyendo que ese era su verdadero destino. 

 

 

Una nueva esperanza:  

Bueno, ya para este punto no tengo mucho que decirles, aunque la razón por la que creo que Obi-Wan debió ser una trilogía en vez de una serie, es por simple lógica, algo de lo que Stuart Beattie estaba consciente, quien era uno de los guionistas originales a cargo del proyecto, y tenía ideas muy interesantes que eran mejores que lo que vimos al final, y este vídeo lo explica muy bien. Personalmente creo que hacer una trilogía que explicara los hechos ocurridos luego de La Venganza de los Sith, era la opción más inteligente, porque es bastante obvio que una serie no iba a tener el presupuesto ni los efectos de una película de Star Wars, estamos hablando de una franquicia que brilla más por sus trilogias, por Dios que contar un acontencimiento tan importante como este, sí o sí debió ser una película entera y con un par de secuelas, pero ya sabemos que el CEO de Disney no se caracteriza por tomar las mejores decisiones en cuanto a sus franquicias se refiere.

 

Lo que me resulta curioso, es ver cómo muchas personas tachan a esta serie como lo peor que se ha hecho de Star Wars y por ende mató a la franquicia para siempre, cuando la Trilogía de Disney es incluso peor en cuanto a guion y dirección, siendo una nueva historia mucho más inconsistente y peor escrita, mientras que Obi-Wan solo pretendía mostrarnos una historia jamás contada que encalza mejor con las trilogías anteriores, aún con los defectos que esta pueda tener. Y hablando de eso, la gente se queja demasiado de los defectos de esta serie e incluso la llegan a comparar de manera injusta con la trilogía nueva para justificar que esta última es mejor, pero esto solo genera baches y contradicciones en los argumentos de estas personas, siendo que dicha trilogía tiene más presupuesto y por ende se va a ver espectacular, pero el resto de cosas hacen que palidezca bastante si la comparamos con las trilogías anteriores. En el blog anterior expliqué por qué no debemos ser tan conformistas a la hora de analizar o criticar un producto, pero una cosa es hacer esto último, y otra muy diferente es querer imponer tus gustos personales para atacar directa o indirectamente a varias personas que aman lo que tú odias, es simplemente ser demasiado subjetivo y desconsiderado, porque no dejan que el resto disfrute lo que ellos tanto repudian, y por ende son ese tipo de personas a las que no les debes prestar mucha atención.

 

En conclusión, Obi-Wan Kenobi no me parece una serie terrible, tiene sus momentos, como la escena en la que Leia y Kenobi conversan sobre lo que es ser un Jedi y de su amistad con Padme , y la gran mayoría de las escenas de acción me parecen disfrutables, además de que resulta muy gratificante y nostálgico ver a varios actores volver a interpretar a sus viejos personajes, pero es obvio que todo eso generó en potencial desperdiciado, y me hubiera gustado que se atrevieran a ir más allá. El único rayo de esperanza que le veo a este producto, es que hagan una segunda temporada en donde estén dispuestos a no cometer los mismos errores, o que esté a cargo de un director y guionista diferente, aunque yo preferiría que no hagan nada más relacionado a Obi-Wan que no sean cameos o referencias, ya que la esencia original del personaje todavía se mantiene, y no deberían mancharla con la sobreexplotación.  

 

The Batman es justo lo que el Cine de Superhéroes necesita | Crítica y Opinión

 

 

La esperanza de un medio de entretenimiento perdido en sí mismo

 

"La gente necesita ejemplos dramáticos para sacarlos de la apatía y no puedo hacerlo como Bruce Wayne. Como hombre, soy de carne y hueso, puedo ser ignorado, puedo ser destruido, pero como símbolo... Como símbolo puedo ser incorruptible. Puedo ser eterno."

 

-Bruce Wayne en Batman Begins.

Como había prometido hace mucho tiempo, en esta ocasión les traigo mi crítica, análisis y opinión sobre The Batman, la nueva película del Murciélago dirigida por Matt Reeves y protagonizada por Robert Pattinson, dando sobretodo los puntos del por qué es un filme tan exitoso e increíblemente bien hecho, al punto de considerarlo como lo que justo se necesita en un medio tan sobreexplotado como lo es el Cine de Superhéroes actual, y por ende explicarles el por qué lo considero un buen ejemplo para las próximas películas que se hagan de este género, no solo basadas en DC Comics, sino también en la competencia. En caso de que sean lectores asiduos de este blog, les advierto que a partir de ahora, algunas entradas no serán tan extensas como antes, esto debido a falta de tiempo para ser tan activo de forma constante, o porque simplemente no quiero abarcar demasiado en un solo blog, dando la posibilidad a que más adelante pueda seguir hablando del tema en cuestión. Sin más que agregar, comencemos.

 

The Batman es sin dudas de esos poquísimos casos donde el público se siente satisfecho, al entregarnos un producto que no solo es de auténtica calidad, sino que cumple con lo que realmente prometía tanto en sus trailers como en las declaraciones que el director y los actores habían dado sobre la cinta. La actriz Zoê Kravitz, quien interpreta a Catwoman en esta versión, había acertado en decir que íbamos a ver una historia muy profunda y humana, dando lugar a diversas interpretaciones, como ver a los personajes mucho más apegados a nuestra realidad, con varias matices y que tendrían un desarrollo que los haría más entrañables y memorables, resultando en una historia que no es completamente oscura, pero que tampoco es de esas en las que no te puedes tomar nada en serio, siendo un perfecto balance entre una historia muy turbia y adulta, con el toque humorístico y caricaturesco que suelen tener los personajes del Universo de Batman, con la diferencia de que aquí tenemos a versiones nunca antes vistas de dichos personajes, al menos en lo que al Cine se refiere.

 

La misma película nos confirma estar rodeada de una ambientación y estética espectacular, tan solo hay que ver los primeros 10 minutos para darnos cuenta de que estamos viendo a la que posiblemente es la Gotham más sucia y decadente del Cine, una de las ciudades más peligrosas y terroríficas de la ficción, el mismísimo Infierno en la Tierra, de donde pueden resurgir critaturas igual de monstruosas y sinestras que solo buscan el caos y la destrucción, pero que a su vez existen las fuerzas del orden y del bien, personificadas en aquellos individuos que todavía creen que la ciudad puede salvarse y renovarse, aunque tengan que arriesgar sus vidas para demostrarlo, algo que se plantea con el díalogo que tienen Bruce y Selina al final de la película. Resulta curioso cómo la obra se encarga de hacer que todo el concepto de Batman sea mucho más creíble que en otras adaptaciones, mostrándonos un Justiciero Enmascarado que puede ser violento y hasta cruel con los criminales al punto de la insanidad, pero que aún así se mantengan los valores morales que tanto caracterizan al personaje, aunque aquí lo hacen de una manera distinta a la que se nos tienen acostumbrados, pues se nos muestra a un Bruce al que de plano se le puede cuestionar su estado mental, que en lugar de esconder su verdadera personalidad bajo la fachada de un playboy millonario y filántropo, todo el tiempo mantiene su carácter melancólico y aura siniestra, esto debido a ser un Bruce Wayne mucho más introvertido y menos superficial, lo cual da lugar a un personaje más humano que no tiene que fingir lo que realmente es, aunque puede que esos aspectos cambien en las futuras secuelas.

 

Es obvio que se pueden decir muchas cosas con respecto a este nuevo Batman, como que bajo un contexto más realista, los ciudadanos de Gótica e incluso las personas más allegadas a él, puedan intuir su identidad como Vigilante, es decir, estamos hablando de un tipo rico y millonario que se recluye en su propia mansión lujosa, y si lo comparamos con otro tipo que posee múltiples gadgets y estilos de combate que requieren de una gran dinero y entrenamiento, entonces cualquiera puede llegar a la conclusión más obvia: Batman es Bruce Wayne. Sin embargo, lo que hace tan interesante el tema de la doble identidad en los Superhéroes, es que da paso a que el autor de turno sea capaz, de jugar con este elemento para que la historia se mantenga coherente y precisa con lo que quiere contar, evitando cometer los mismos errores que se han hecho con otros personajes como Spider-Man y Superman, donde a veces la identidad de ambos se deja muy de lado y no intentan justificar el por qué la gente no los reconoce, aún cuando en escenas anteriores de sus películas, cualquier persona podría darse cuenta de ello, pero eso no sucede por simple conveniencia del guion. Afortunadamente, Matt Reeves supo cómo darle una buena explicación a este detalle, haciendo que Bruce sí mantenga su fachada de heredero millonario, actuando como el representante de su propia empresa en algunas ocasiones, como la escena en la que asiste al funeral de un candidato político, en donde se encuentra con el hijo de este último (haciendo un paralelismo con la terrible infancia de Bruce) o cuando tiene que interactuar con varios ejecutivos de Industrias Wayne y otros funcionarios de Gotham como Bella Réal, quien incluso le crítica el hecho de que su familia tiene un pasado filantrópico pero aparentemente él no hacía nada por la ciudad, algo que repecurtió bastante en Bruce debido a ser un hombre muy introspectivo y reflexivo.

 

Personalmente, esta es una historia de Batman que yo habría escrito si se me hubiera dado la oportunidad, al menos mi versión tendría ciertas similitudes con la visión de Reeves y no tendría mucho que cambiar, siendo quizás en relación a esto último algunas cosas, como la presentación del Riddler y su desenvolviemiento en la historia, quizás dándole un rol más activo para que se muestre como un criminal más apegado a los cómics, y no tanto como un intelectual que se dedica a hacer vídeos bizarros por internet y que reúne a varios seguidores que lo ayudan a cometer algunos de sus actos ilícitos. Aunque bueno, realmente eso sería lo de menos, porque el personaje cumple con ser un verdadero asesino, y alguien aterrador al más puro estilo de Jigsaw, Hannibal Lecter o el Asesino del Zodíaco, siendo este último la mayor inspiración para el personaje. También me gustó el cómo se cuenta su pasado y sus motivaciones, haciendo un gran contraste con la historia de Bruce, siendo un huérfano que a diferencia de este último, no creció y vivió en una casa lujosa y con muchos billetes, sino que se vio obligado a convivir con otros niños problemáticos e incluso a drogarse para sobrellevar el dolor y la miseria, provocando en él una serie de trastornos que lo convertirían en una persona bastante peligrosa, a pesar de su frágil e inofensiva apariencia. Debo decir que la inclusión del Pingûino, Jim Gordon y Selina Kyle en la historia me pareció genial, siendo personajes muy bien caracterizados, que directa o indirectamente ayudan a resolver los Acertijos, además de que al igual que Carmine Falcone contribuyen mucho al desarrollo de la trama, resultando en un Filme Noir en todo sentido, algo que pocas veces se ha visto en este tipo de Cine.

 

Aún así, me hubiera gustado que esta historia tuviera algún tipo de relación con el filme del Joker, ya que al tener tantas cosas en común, habría sido una grata sorpresa revelar que ambas películas suceden en el mismo Universo pero en diferentes épocas, quizás es algo que le podría haber dado más coherencia y relevancia a algunos acontecimientos, pero de igual de forma me gustó la aparición del nuevo Guasón en la escena eliminada, interpretado por Barry Keohgan, mostrando a un Payaso intimidante, realista e inclusive asqueroso  en todo sentido. No podría esperar menos de Matt Reeves, a quien siempre le tuve confianza por su experiencia como director, en especial en la trilogía de El Planeta de los Simios, la cual tiene algunos de los mejores blockbusters de la actualidad.

 

 

 

Bueno, habiendo dado un resumen de lo que pienso de la película, ahora me gustaría analizar más a fondo las razones de su gran éxito.

-Saber adaptar el material original: 

 

De entrada, se suele tener la creencia de que las películas actuales de Marvel son para niños a causa de diversos factores presentados en sus historias, lo cual es una malinterpretación, pues es bien sabido que los filmes del UCM son para todo público, desde los más conocedores de los cómics, hasta los que desarrollaron un gusto por el Cine de Superhéroes, siendo que también se ha llegado a la conclusión de que el problema de Marvel es su humor, pero en realidad, el verdadero inconveniente que suele tener el UCM, es la forma en la que cuentan sus historias. Es decir, en un principio lograron llamar la atención con Iron Man, Hulk y Thor, pero no fue hasta la llegada de los Vengadores que la gente supo que estaban presenciando un Universo compartido, con películas buenas y decentes en su género, pero algunas de estas no se caracterizaban por estar particularmente bien escritas, un ejemplo serían las individuales de Thor, un personaje muy interesante por sí mismo, y con muchas historias que se podrían adaptar bastante bien, pero el tono tan simplista y aburrido de sus películas hacían que la gente dejara de prestarle tanta atención, y no fue hasta la llegada de Thor Ragnarôk donde empezó a recuperar más interés, y aún así, el que reemplazaran el tono de sus posteriores películas por algo más infantil y cómico, contrastaba demasiado con lo que el personaje solía representar en un Universo más centrado en el Dios del Trueno, lo que hizo que muchos ya no se lo tomaran en serio, y prefirieran a su versión de Infinity War, donde realmente demostraba todo el potencial que podía tener como personaje. 

 

Esto que acabo de contarles sucede con el resto de personajes del UCM, donde los directores y guionistas parecen no saber qué hacer con ellos en varias ocasiones, un ejemplo de esto es Black Widow, a quien le hacen una película individual que resulta bastante promedio y no cuenta absolutamente nada relevante con relación a los nuevos personajes, aún cuando el inicio de la cinta daba entender que iba a ser una historia más adulta llena de tramas de espionaje, al más puro estilo de Capitán América y El Soldado del Invierno, pero resultó siendo un completo bodrio, y con un villano patético y rídiculo hasta para los estándares del UCM. Ya que estamos hablando de eso, el segundo verdadero problema que tienen estas películas, es que en varias ocasiones el título de las mismas les quedan demasiado grande, y carecen de coherencia con lo que se quiere presentar, de ejemplos tenemos a Age of Ultron, Civil War y Doctor Strange in The Multiverse of Madness, donde se supone que debería suceder un gran evento que cambie el rumbo del Cine de Superhéroes para siempre, pero que se muestra como algo más reducido, con chistes sin gracia o que la idea original de la historia no funciona como realmente debería.

 

Esto último fue algo que The Batman no solo hizo bien, sino de una manera tan excelente que muchas películas de superhéroes debieron haber hecho. Al ser un filme más humilde y minimalista, en el sentido de que no tiene relación con otros proyectos, se pudo lograr algo más conciso y con elementos que no entorpecieran a la narrativa anteriormente expuesta. Una regla general que se tiene sobre las historias, consiste en que lo más importante de esta no es su premisa, sino en la habilidad que tiene el escritor para desarrollarla y contarla, sea del género que sea. En el caso de Batman, normalmente suele decirse que el tono serio del personaje en el Cine, se deben bastante a la Trilogía de Nolan, y si bien esto tiene mucha razón, no debemos olvidar que Tim Burton fue el primero que le devolvió esa oscuridad al personaje con sus dos películas, la cual los próximos directores tratarían de imitar de una u otra manera, y aunque se diga que estos filmes fueron muy caricaturescos o algo que se podían apreciar mejor en su época, lo cierto es que dichas historias tienen aspectos muy interesantes y tan adultos, que es muy probable que no se podrían hacer de la misma forma a día de hoy. A propósito, me encanta la idea de pensar que incluso los filmes más infames del Murciélago, dirigidos por Joel Schumaher, fueran los responsables de que tengamos la historia más moderna y elegante del personaje, pues todo buen creativo es capaz de tomar en cuenta hasta lo que no debe hacer a la hora de contar una historia.

 

Hablando de eso, The Batman considera lo más importante a la hora de contar cualquier historia basada en un libro, una película o un cómic, y es saber adaptar el material original, y de ser posible, hacerlo algo fresco e innovador para el público. Sin embargo, un error que cometen muchos directores hoy en día, es que tratan de innovar con sus adaptaciones dando una historia que se sienta real y profunda para las generaciones actuales, pero el problema es que a veces lo hacen de una forma tan extraña, que simple y llanamente no encaja mucho con el mensaje que quieren transmitir, un ejemplo de esto es Alicia en el País de las Maravillas del propio Burton, la cual a pesar de tener una estética inconfundible y maravillosa, el hecho de que sea una subversión del cuento original, contando una historia medieval y de profecías, hacen de la protagonista más una Mary Sue que un personaje femenino auténtico, en especial porque se generan inconsistencias como que de repente Alicia sea una experta espadachín sin ningún tipo de entrenamiento, capaz de vencer a un Dragón escupe fuego que puede destruir ejércitos enteros con tan solo soplar, algo que está muy al nivel de Rey en la Trilogía de Disney, aunque al fin y al cabo las películas de Alicia sí cumplen con dar un buen mensaje. Todo esto nos dice que la dirección de una película podrá ser muy buena, y los efectos especiales podrán ser espectaculares, pero si el guion de la misma no se trata como es debido, entonces todo lo demás queda prácticamente obsoleto.  

  

No obstante, el filme de Matt Reeves hizo esto tan bien, que muchos expertos en cómics ya han mencionado todos los easter eggs y referencias que existen en la misma, pero lo más fundamental es que gracias a esta cinta, hay más posibilidades de mostrar historias que pueden ser muy bien adaptadas, lo cual a su vez significaría la expansión de este Universo y la inclusión de villanos muy poco conocidos, como El Hombre Calendario, un asesino en serie que se caracteriza por dejar como pistas las fechas de sus crímenes, y El Profersor Pyg, un enfermo mental que gusta de arrancar el rostro de sus víctimas para hacer máscaras con los mismos, así como la reinvención de personajes como Bane y Dos Caras, adaptando las mejores historias de Batman en donde ellos toman el papel antagónico, los cuales son La Caída del Murciélago y El Largo Halloween.        

-Saber contar una historia:

 

Ya he dicho antes que lo más importante en una historia es el cómo la cuentas, pero si nos referimos a The Batman, podemos observar que es un gran ejemplo de ello, tomándose su tiempo para construir sus tramas y sub-tramas sin necesidad de ser demasiado lento o demasiado rápido en ello, y sin extenderse más de lo que debería, aprovechando cada minuto de duración para que todos los hilos de la historia se conecten entre sí. Como había mencionado en mi entrada donde hablé de esta película por primera vez, abacarcando el tema del terror en la ficción, un factor inherente para que una historia con tendencia a este género funcione bien, es precisamente su ambientación, algo que The Batman emplea de manera perfecta. Aquí no importa si es un día soleado o una noche lluviosa, la ambientación aunado a la narrativa hacen que la historia se sienta inmersiva en todo sentido, tomándose algunos descansos cuando Bruce se quita su traje e interactúa con otros personajes como Alfred, mostrando gran parte de su humanidad.

 

Como también mencioné, The Batman toma mucho de referencia lo que se vería en un Filme Noir, siendo que antes de esta cinta, lo único que se podría considerar más cercano a esto son las escenas de Rorschach en Watchmen, donde el personaje relata los monólogos que escribe en su diario, algo que curiosamente también hace Bruce a lo largo de la película. Pero la diferencia es que The Batman toma prestados estos elementos para contar su historia de una manera orgánica, como el hombre veterano y deprimido que vive en una ciudad sin esperanza, pero que por alguna razón cree que puede hacer un gran cambio con sus acciones, la mujer protagonista que es el objeto de su deseo, y que es responsable de mover gran parte de la historia, además de la típica imitación de una ciudad corrupta de los años 20 o relativo a la Nueva York de los 80´s, un elemento que otras cintas como Joker de Todd Phillips utilizan para contar su historia, o incluso las películas de Blade Runner, a la cual The Batman le debe bastante por su ambientación y personajes pintorescos y memorables. 

 

 

-Saber dar un mensaje:

 

Muy fiel al Joker de The Dark Knight, el dinero no es lo que importa, lo que importa es enviar el mensaje; si vamos a tocar el corazón de esta obra, debemos conocer la temática de la moralidad y la venganza, y de cómo esta se deconstruye con el pasar de la historia. Batman tiene un desarrollo a partir de una idea, en la cual trata de ser alguien que quiere hacer Justicia por su propia mano. Teniendo eso en cuenta, podemos ver que a pesar de que lo ha intentado una infinidad de veces, Gotham no ha cambiado en nada durante los 2 años en los que el Murciélago estuvo activo, algo que él mismo admite al principio de la cinta. Por ende, es irónico que precisamente se necesiten de ejemplos dramáticos para que una ciudad tan corrupta cambie irremediablemente su forma de llevar el día a día, y que el causante no sean más que los propios criminales. Cerca del final, vemos como el plan maestro del Riddler es ejecutado de una forma brillante y tal y como él lo quería, sometiendo a Gotham a una inundación de la que muy pocos habrían salido con vida de no ser porque Batman pudo contener la situación a tiempo, derrotando a los seguidores del Riddler y salvando a los ciudadanos.

Esto hace un gran contraste, y un excelente manejo de la psicología en el personaje; aquel Vigilante que quería hacer un cambio y no descansaría hasta lograrlo, creyó que la única forma de hacerlo sería convirtiéndose en la Venganza, un individuo al que todos deberían temer por simple instinto natural, un animal nocturno que es el terror absoluto de los criminales, pero que ante un desastre de porporciones bíblicas, se ve obligado a actuar como todo lo contrario, frustrando los planes y refutando los argumentos de su mayor enemigo en ese momento, quien irónicamente también es su mayor admirador, el cual a causa de su concepto de la Venganza, se convirtió en un completo homicida que quería destruir a la ciudad que lo vio nacer. Esta premisa del arco final, sumado a la magnífica música de Michael Giacchino y Nirvana, aunado al monólogo de Robert Pattinson, hacen que el mensaje que te puede dejar la película sea comprensible y orgánico, provocando el nacimiento de una de las mejores escenas jamás vistas en el Cine de Superhéroes, la cual simboliza a la Venganza y Retribución convertida en la Esperanza y Restauración de Ciudad Gótica. 

  

Para finalizar con este post, como de costumbre quiero expresar mi opinión sobre algunas cosas relacionadas a la cinta, en forma de un par de preguntas:

-¿Robert Pattinson es el mejor Batman?

 

Siendo sinceros, algo que no entiendo es la costumbre que se tiene actualmente de juzgar al personaje por el actor que lo interpreta, y no por el trabajo que este último desempeñe en su papel. Ya hemos escuchado hasta el cansancio el cómo dicen que los 3 Spider-Mans son buenos personajes independientemente de su calidad y escritura, una opinión que curiosamente se ha mantenido en el público general desde No Way Home, siendo que antes de dicha película, muchos ya decían odiar al Spider-Andrew y al de Holland por sus películas y disque pésimas actuaciones, cuando en realidad las decisiones creativas nunca fueron culpa de ellos, pero es obvio que esto les daría cierta reputación. A lo que quiero llegar con esto, es que lo mismo se han hecho con los actores que intrepretaron a Batman, le pasó a Michael Keaton, a quien se le criticó bastante por ser un actor de comedia en su época, y por ende según muchas personas no tenía el porte para ser Batman, pero al final le terminó cerrando la boca a gran parte del público con su actuación, mismo caso con Ben Affleck, quien recibió bastante odio y burlas por haber participado en proyectos como Daredevil de 2003, y ahora gracias a Batman v Superman y al Snydercut mucha gente suplica para que vuelva a interpretar a su versión del Murciélago en futuras entregas, y con Pattinson la cosa no fue muy diferente por tener su estatus de Vampiro Brilloso en cierta saga de películas, siendo que incluso yo admito que la noticia de que interpretaría a Batman me dio bastante gracia, pero tras saber que es un gran actor, y al ver los trailers y la propia cinta, terminé rectificando con respecto a mi pensamiento.

 

Lo que me sorprende, y es algo que tampoco entiendo, es que aún después del estreno, muchas personas sigan diciendo que Pattinson no tiene el porte para ser Batman, generalmente por razones estúpidas como que el hombre necesitó de un doble de riesgo para las escenas de acción, o que simplemente el físico del actor no era suficiente para llenar el Traje y cosas así, cuando eso en realidad es lo de menos, porque con la lógica de estas personas, entonces el Batman de Keaton sería el peor de todos porque el actor ni siquiera entrenó para su papel, y sería comparable a otras versiones más caricutescas como el Batman de Adam West, o el de Val Kilmer y George Clooney, comparaciones que honestamente están muy fuera de lugar. Debemos entender que cuando se trata del Cine de Superhéroes, el actor solo llega a cumplir con su trabajo y nada más, y en casos extremos sí ha llegado a entrenarse físicamente para su papel, algo que Pattinson hizo, y al fin y al cabo, el que necesitara a un doble de riesgo no tiene mucho que ver y no afecta en nada a su trabajo, ni que todos pudieran ser como Tom Cruise para realizar sus propias escenas de acción.

 

Dejando de lado la hipocresía o contradicciones que toda la polémica de los actores pueda generar, y contestando de lleno a la pregunta, pues es bastante difícil comparar a Battinson con el Batman de Nolan y el resto de versiones, ya que todos tienen algo que los caracterizan entre sí, y daría para otro tipo de análisis. Sin embargo, toda la estética, desarrollo e innovación que pudo presentar este Batman, hacen que automáticamente sea mi favorito, y la versión del personaje con más potencial que he visto en el Cine.   

-¿The Batman es la mejor película del personaje?

Bueno, aquí quiero ser más conciso y puntual con lo que voy a decir; Me resulta bastante irónico que la competencia de DC y Warner, lo tengan todo para crear historias de calidad y muy originales, pero desperdicien ese potencial por simple dinero o para complacer al público menos exigente y conformista con sus películas. O sea, es gracioso cómo en varias de sus historias te presentan a personajes que son asesinos en serie, anti-héroes y demás seres que supuestamente deberían de ser villanos, pero que por alguna razón los tratan con un tono más ligero y menos maduro, al punto de que se vuelven en algo infantil e intrascendente, y sin ningún tipo de aspiraciones de hacer algo realmente bueno con estos personajes, un punto débil que Warner ha aprovechado para crear películas más independientes que no están ligadas a su Universo Extendido, aunque algunas de estas sí tienen un verdadero valor narrativo. Una vez más, DC Comics ha demostrado que en cuanto a historias más adultas suele ser mucho mejor que Marvel, y esperemos que la próxima película indepediente de esta franquicia también cumpla con las expectativas.

 

Es por eso que opino que junto a The Dark Knight, Batman Begins, Batman de 1989 y Batman Returns, el filme de 2022 es sin lugar a dudas una de las mejores películas del personaje, y si bien es muy discutido que sea la historia definitiva de Batman en el Cine, junto a su Bruce Wayne es mi favorita personal. Es una alegórica reflexión de la mente humana y los trastornos que esta puede albergar, un Filme Noir excelentemente construido en forma de película de superhéroes, y efectivamente, una historia profunda y humana, que trata sobre un hombre que al final del día, acepta con pesar el legado de su familia, y decide ser un filántropo que salva a su propia ciudad de la destrucción y la corrupción eterna. The Batman, la cinta que tiene un merecido puesto en el mundo del entretenimiento gracias a Matt Reeves, y que será recordada para siempre como una de las Obras Maestras del Cine de Superhéroes.